El año 2020 supuso un antes y un después para la gran mayoría de empresas. Aquellas que aún no estaban inmersas en un proceso de digitalización, tuvieron que adentrarse de golpe para poder sobrevivir y, como consecuencia de este hecho, la demanda de perfiles IT se ha disparado. Sin embargo, para los recruiters, encontrar y evaluar este tipo de perfiles tecnológicos puede suponer un reto.
El sector tecnológico está en pleno auge. En nuestro país, esta área da trabajo a 471.500 personas, o lo que es lo mismo, a un 2,4% de la población española. Solo el año pasado, se firmaron 135.828 contratos, la mitad de ellos indefinidos.
Siguiendo con los números, según un estudio de Randstad, desde 2012 se han creado 1.250.000 puestos en el sector IT nacional.
Sin embargo, pese a todo este crecimiento, cada vez hay menos profesionales IT y los alumnos matriculados en carreras tecnológicas ha caído un 30%.
Esta diferencia entre la oferta y la demanda ha creado un mercado laboral altamente competitivo, donde la rotación en las organizaciones es elevada pero, para los candidatos, el lapso entre un puesto y otro es muy corto.
La alta competitividad ha creado la inflación salarial de los perfiles IT y, junto a los beneficios sociales, suponen un reto para la creación de una estrategia por parte de las empresas para atraer y retener el tan codiciado talento tecnológico.
A diferencia de otro tipo de candidatos, los de perfil tecnológico están acostumbrados a que sean contactados para cambiar de empresa, sobre todo si lo que se busca es cubrir un puesto muy especializado.
Por eso, el técnico de selección IT debe disponer de una serie de habilidades esenciales para que la búsqueda activa de candidatos resulte satisfactoria.
Para los reclutadores sin experiencia, puede resultar complicado saber qué es lo realmente se está buscando.
Una característica deseable para los seleccionadores es que cuenten con la preparación digital adecuada a los perfiles más demandados por su empresa o bien, obtener toda la información suficiente por parte de la persona que hará la evaluación final del candidato, con detalles exhaustivos de las hard skills y soft skills requeridas. De esta manera, será más fácil entrevistar a los candidatos y detectar el grado de conocimientos que posee.
Otra de las características del seleccionador IT es la capacidad de adaptarse a los cambios. La tecnología está en constante evolución, y así lo hacen también los perfiles demandados. Saber qué tipo de lenguaje de programación está dominando el mercado o qué tendencias digitales están en alza es fundamental para no quedarse estancado.
Como hemos comentado, el mercado IT es muy competitivo y son los candidatos quiénes elijen donde trabajar. Por eso, los recruiters también deben ser excelentes negociadores y saber comunicar de forma atractiva por qué su empresa es la mejor y por qué debería trabajar allí.
No obstante, habrá muchas ocasiones en las que, debido precisamente a la competencia salvaje, los candidatos no acaben el proceso de selección - hecho que es más común para los perfiles IT que en el resto -, por lo que también es necesario tener una alta tolerancia a la frustración.
Una vez la búsqueda de candidatos ha dado sus frutos, llega la hora de evaluarlos. Pero, ¿qué hay que evaluar?
Expertise. Es decir, el nivel de especificificidad, cuánto tiempo lleva trabajando en IT y cuál es su grado de conocimiento sobre la teoría que necesita aplicar en el puesto que se quiere cubrir.
Herramientas. Es necesario hacer un checklist de todas las herramientas que necesitará para poder desarrollar las funciones propias del puesto, saber si ya las ha usado y en qué tipo de proyectos.
Capacidad de respuesta. Interpretar si el candidato está cómodo explicando su experiencia, si sabe correlacionar herramientas y sinergias, etc.
Pruebas específicas. Para saber si el candidato es el idóneo, es recomendable realizar pruebas de conocimiento específico para evaluar el nivel que posee y si es suficiente para lo que estamos buscando.
Ranstad Technologies ha detectado una serie de perfiles IT que estarán en alza a los próximos años:
Profesionales del Big Data y Data Scientist. Son los roles capaces de transformar los datos en bruto en información útil y, a partir de esa información, crear modelos predictivos que sirvan para tomar decisiones sobre estrategias empresariales.
Arquitectos cloud. Perfiles capaces de diseñar estructuras y administrar sistemas en la nube, muy útiles a la hora de trabajar a distancia.
Expertos en cyberseguridad. Capaces de proteger los sistemas y las redes, el software, los datos y los sistemas de información de las compañías de ataques informáticos.
Ingenieros DevOps. Son los encargados de la aceleración en el proceso de desarrollo tecnológico de las compañías.
Desarrolladores Full Stack. Profesionales polivalentes que desarrollan software tanto Front End como Back End, que poseen elevados conocimientos técnicos.
Junto a estos puestos, hay que tener en cuenta también el tipo de perfil, si es junior o senior, ya que la disparidad en el sector IT es muy marcada.
Los perfiles junior serán los encargados de realizar las funcionalidades técnicas, y los esfuerzos del seleccionador estarán centrados en garantizar el dominio de hard skills relacionadas con el dominio de determinado lenguaje, framework o técnicas de trabajo como el SCRUM.
En contraposición, los perfiles senior IT suponen, además de los requisitos de los perfiles junior, contar también con soft skills capaces de gestionar equipos y proyectos.
En resumen, el éxito en los procesos de selección IT reside en saber hallar al candidato con las cualidades adecuadas junto a una metodología en la que el seleccionador tenga experiencia y sin barreras de conocimiento.
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